Tiempo de lectura aprox: 3 minutos, 18 segundos

¿Cómo gestionar de la mejor manera posible el desamor?

El desamor es un caos emocional que nos enseña todas las carencias afectivas que tenemos en el amor. En él aprendemos a vernos cara a cara con todos esos conceptos erróneos que hemos tenido sobre el amor, “el juntos para siempre” “darlo todo sin dejar nada de reservas para una misma” “el amor lo puede todo” y la lista podría ser muy larga. El desamor es nuestra lucha interna de no aceptar que a veces hay amores que merecen tener un final. Quizás ese final no nos llena de felicidad, pero, donde el amor no está “destinado” a ser, suele terminar en tormentas emocionales. A lo mejor para que seamos más conscientes de que en esos lugares ya no hay un lugar sano para quedarnos.

El desamor hay turbulencias emocionales donde no hay paz con todo aquello que habíamos vivido al lado de alguien. Hay dolor, tristeza, rabia, decepción, soledad y sensación de abandono. Estás procesando tanta información que no conocías sobre el amor, que no sabes cómo gestionar todo esto de la mejor manera posible. Esto es un proceso, en la vida lo bueno y lo malo, suelen ser cambiante, ningún dolor es permanente y de este laberinto emocional también podrás salir. Pero, no olvides que ahora toca sentir, conectar con todo el dolor presente, ver cómo puedes sanar y estar bien.

A veces creemos que no es para tanto cargar con tanto dolor, nos cuestionamos incluso si es lógico sufrir tanto por una relación o por alguien que ahora mismo no sigue a nuestro lado. Para eso no hay respuestas, al final tus experiencias vividas, tus expectativas y todo aquello que querías construir al lado de esa persona, merecen ahora pasar a otro lugar en tu vida. Ahora toca reconocer que necesitas y debes ser tu prioridad en medio de tanto caos emocional.

El desamor es un amor que no es correspondido, donde emocionalmente te gastas y no sabes cómo salir de ahí. Crees que el amor lo puede todo, pero, a veces donde ya no nos quieren, lo mejor es recoger nuestra dignidad e irnos. Agradecer por lo vivido y reconstruirnos para estar bien en otros lugares. A pesar de todo lo que podemos llegar a sentir por alguien que no nos quiere, no olvides que, en medio de tanto dolor, necesitas cuidar de ti. ¡No dejes de hacerlo por favor!

Ahora eres la protagonista de tu historia, de cómo vas a permitir que te quieran en otros lugares, de que vas a dar en una relación y sobre todo irte a tiempo de aquellos lugares que no pueden quererte cómo tanto quieres y necesitas que lo hagan. En este viaje de aprender a gestionar el desamor, vas a aprender a amarte, respetarte, valorarte y darte todo aquello que has exigido en donde no podían hacerlo.

Para gestionar el desamor de la mejor manera posible, vas a necesitar

Vivir el duelo

Cuando el desamor aparece necesitamos vivir el duelo, pasar por sus fases y ver quiénes somos cuando una relación termina. El duelo es un espacio de dolor, pero también de conexión con uno mismo. En este espacio parece que todo se está derrumbando, pero, lo que no vemos, es como nos estamos reconstruyendo por dentro y para bien.

Fases del duelo en una ruptura

1-   Negación

2-   Ira

3-   Negociación

4-   Tristeza

5-   Aceptación

El duelo para nada es lineal, un proceso donde hay muchas curvas emocionales. A pesar de lo duro que puede ser lidiar con el desamor, podemos salir de ahí.

Cuidar de ti

No te abandones porque otros lo hicieron. No dejes de amarte porque otros lo hicieron. No te alejes de ti porque una relación dejó de funcionar. Quédate contigo incluso teniendo miedo de hacerlo.

Reconstruir tu autoestima

¿Ahora mismo cómo es la relación que tienes contigo?

Muchas veces cuando el desamor aparece dudamos de lo que valemos en el amor. Eres suficiente, incluso si ahora mismo con tantas decepciones crees que no lo eres. Reconstruir tu autoestima es hacer las PACES CONTIGO. Regresar a ti, perdonarte, soltar aquellas cosas que te hieren y buscar la manera posible para sostenerte en medio de tanto dolor.

Conectar de nuevo con la vida

Quizás ahora nada te llena, sería bueno que volvieras a conectar con aquellos sueños que querías alcanzar. Visita tu baúl de cosas pendientes por hacer y ponte objetivos personales. Apuesta por ti y por tus sueños. Eso te ayudará a lidiar con el desamor y entender que, a pesar de tanto dolor, mereces seguir.

Aprender a quedarte contigo

Abraza y recibe a la soledad, en ella puedes descubrirte un poco más. Quedarte contigo, eso es reconocer que puedes contar contigo en tus peores momentos. Que tú eres ahora mismo tu prioridad y mereces ser tu amiga, tu confidente y tu bastón para seguir.

Sentir

Si tienes que llorar, hazlo.

Si tienes que perderte, hazlo.

Si tienes que detenerte, hazlo.

Si tienes que buscar ayuda para seguir, hazlo.

Sentir es reconocer y aceptar que no somos “superhéroes” no podemos con todo. No puedes con todo. Y está muy bien no poder con todos en algunas ocasiones.

Soltar

Difícil tarea cuando el desamor está presente y nuestros sentimientos no desaparecen. Soltar duele, pero sostener nos puede matar.

Cuando algo no funciona, suelta.

Cuando una relación termina, suelta.

Cuando ya no te quieren, suelta.

Cuando vives llorando por un amor ingrato, suelta.

Cuando lo recíproco no existe al lado de alguien, suelta.

Cuando amar duele, suelta.

  Sanar

Aquí es ser responsable de ti, ver que necesitas hacer para que ese dolor no te destruya. Sanar es un viaje, no lineal, donde vas a necesitar ocuparte de ti. Perdonar y perdonarte. Agradecer y seguir, porque a pesar de todo, merecemos seguir. Vivir, estar bien y disfrutar de la vida. Sanar es amar y respetar esas heridas que deja el desamor, es no buscar culpables, ver qué podemos aprender de todo esto y mejorar.

Alexa ❤

Imágenes de: Adobe Stock

Loading

Escrito por

Alexa Dacier

Alexa Dacier / Psicología / Terapeuta sexual y de pareja
Todos necesitamos donde apoyarnos cuando emocionalmente creemos que no podemos más.

Aquí nos damos el permiso para:
Sentir.
Soltar.
Amar.
Aprender a poner límites.
Reconstruir nuestros vínculos afectivos.
Sostener relaciones sanas.
Aplicar la autocompasión.
Cambiar el dialogo interior.